La productividad en tu bienestar. Agenda del bienestar

Ahora que estamos llegando al final del año, las reflexiones sobre la productividad en este 2021, pueden ser claves en tu bienestar. Y no me refiero a un número concreto de logros o cumplimiento de tareas.

Me refiero a detenernos a pensar sobre qué es aquello a lo que le he prestado más atención y tiempo durante este año. Si eso me ha aportado bienestar, si está alineado con mis principios y valores, o si, por el contrario, debo dar un pequeño giro para este año que va a comenzar.

Vamos a verlo más en detalle.

 


&amp

 

La productividad de mi año que termina

 

“Somos lo que hacemos día a día, la excelencia no es un acto, sino un hábito” Aristóteles.

Esta frase tan rotunda del gran sabio me transmite un gran mensaje y encierra distintas enseñanzas.

 

 Somos lo que hacemos día a día

 

Así de simple, sin buscar más profundidad a quién soy y cual es mi propósito de vida. 

 

Mira tu día de ayer, tu día de antes de ayer, tu semana completa y cuéntate a ti misma, ¿qué hago cada día? ¿en qué se basa mi día? ¿qué ocupaciones tengo? Esa es la mejor forma de conocerte y de llegar a conseguir alinear tus propósitos con tus actos.

Solo revisando tu forma de vida podrás llegar a comprobar si lo que yo quiero en mi vida es lo que busco. Si llevas toda tu vida diciendo que para ti lo más importante es algo, y resulta que no le ocupas a ese algo ni un mínimo tiempo de tu día o de tu semana, a lo mejor resulta que no es tan importante, y te estás engañando.

Más en concreto, si en tu escala de valores tienes lo primero un área de tu vida, mira a ver si el mayor porcentaje del día tengo ese valor en primera posición, o si por el contrario estoy ocupada en cosas que no le reportan nada. A lo mejor resulta que el no tener alineado tu primer valor en tu escala con el tiempo de cada día, te puede provocar emociones que no quieres tener, o pensamientos de culpabilidad por no estar dedicando más tiempo a lo que quieres.

Y es a esto a lo que me refiero. Llegadas a nuestra edad creo que es hora que puedas elegir a qué le dedicas el mayor tiempo de tu día, si es que eso te hace feliz. Estamos acostumbradas a hacer cosas porque sí, porque se espera de ti, porque es lo que hace todo el mundo, porque cómo voy a cambiar eso ahora.

Pero  intenta pensar qué pasaría si lo hicieras de otra manera que vaya en la línea de tu bienestar. ¿Se hundiría el mundo? ¿ Sería tan terrible? ¿ Por qué no te lo planteas, aunque sea solo en tu mente? Simplemente te animo a que lo visualices y una vez hecho, si lo que te produce es felicidad y bienestar, sube al siguiente paso, que sería planearlo/planificarlo en tu rutina. ¿ Tienes que hacer muchos cambios? ¿ Es algo rompedor en tu vida, o simplemente es encajar mejor unas piezas y otras de tu día? 

No te niegues a ti misma algo que a lo mejor es sencillo de conseguir, dando los pasos adecuados. La vida es cuestión de elecciones, como siempre digo, y tienes la suerte de poder elegir cómo quiero que sea mi día, respecto a muchas cosas.

 


 

Te dejo una plantilla gratuita para escribir tus reflexiones del año que termina. Pincha en la imágen y tendrás 3 hojas en PDF para que las descargues y las uses las veces que quieras.

Reflexión del año


La excelencia no es un acto, sino un hábito

 

A base de repetir y practicar muchas veces algo es como te conviertes en experto. No porque tengas un don, que es un facilitador y reductor del tiempo que le tienes que dedicar, te conviertes en experto. Es cuestión de trabajo.

A eso se refería Aristóteles, relacionado con ser lo que hacemos cada día, el transformar tareas en hábitos, hace que nuestra mente lo interiorice y actúe con menos resistencia a la motivación y al tesón. 

Para convertir una tarea en hábito tienes que seguir unos pasos de los que te hablé en esta entrada por si quieres echarle un vistazo conseguir un nuevo hábito

Una buena manera de controlar tus hábitos es a través de un registro, sea el que sea, de que lo estás cumpliendo.Por ello es muy útil una agenda o planificador de hábitos.

 

La productividad como elemento de tu bienestar

 

La productividad desde una actitud positiva

 

Un error que tenemos todos, y más aún las personas con actitud negativa, es enfocarnos en lo que no hacemos o conseguimos.

Cuando uno tiene la sensación de que no te da tiempo a hacer las tareas que te propones aparece una visión negativa de tu vida: lo que no consigues frente a lo que sí consigues.

Frente a esa postura es importante registrar lo que haces cada día. Todo aquello a lo que le has dedicado al menos algo de tu tiempo y que te ha hecho posible conseguir lo que tú querías. Sea en el área que sea. Es importante, por tanto, sentarte al final del día, o a la mañana siguiente, y centrarte en aquello que sí has conseguido. Para que no se ponga en primer lugar eso que no te da tiempo, y sin embargo compruebes que has hecho otras cosas importantes.

Por eso todo va relacionado, los hábitos que tienes cada día, y lo alineados que éstos estén con tu propósito de vida. 

 

Conclusión

 

Es un buen momento para sentarte y reflexionar sobre ti y lo que quieres para este próximo año

No tengas miedo a renunciar a eso que no te hace feliz, incluso si es un hábito instaurado en tu vida. 

Si hay algo que nos ha vuelto a demostrar la pandemia del covid es que somos más vulnerables de lo que pensábamos, y que de un día para otro nos puede dar un vuelco la vida y quedarnos sin la oportunidad de hacer aquello que siempre hemos querido. Así que aprovecha este final de año para hacer esta reflexión de tu bienestar.

Si necesitas una herramienta de productividad te recomiendo la Agenda del bienestar, un planificador mes a mes, y semana a semana de los aspectos más importantes del bienestar, que yo he recogido para ti. 

¿Cuales son tus reflexiones del año? ¿ Crees que estás alineada con tu propósito de vida?

Déjanoslo en comentarios, ¡nos encanta leerte!

firma Un cafe con Sandra

 

La productividad, reflexiones a final de año que ayudan a tu bienestar