
El bienestar emocional es otra de las patas que sujeta tu felicidad en la vida. Las emociones forman una parte importante de tu bienestar, debemos conocer y aceptar nuestras emociones ante cualquier situación.
Pero también debemos controlarlas, bajo nuestro yo pensante, para que no se hagan las capitanas de nuestras respuestas.
En este mes de junio trabajaremos el bienestar emocional. Te iré dando contenido y pautas para ver cómo puedes conseguir tener un estado de ánimo que te permita seguir avanzando en tu vida.
Hoy vamos a ver qué son las emociones y los tipos de emociones que hay. Cómo influyen los pensamientos en ellas y cómo hacer para mejorar tu bienestar emocional.
Qué son las emociones
Ya sabes que me gusta ser más práctica en lo que a contenidos se refiere, pero no tengo más remedio que empezar a aclarar algunos conceptos que suelen provocar confusión.
Así que empiezo por hablar sobre definiciones y tipos de emociones. Las emociones son un conjunto de reacciones orgánicas de una persona ante estímulos externos.
Son de corta duración y de mayor intensidad que un sentimiento. De hecho los sentimientos son la consecuencia de una emoción y se pueden verbalizar.
Esas reacciones, que están controladas por el sistema límbico, pueden ser de distintos tipos:
- Fisiológicas. Se generan de forma involuntaria, como las expresiones faciales. Lo que hace que se nos note en la cara lo que nos está entrando por el cuerpo ante alguna situación.
- Psicológicas, cómo la persona procesa lo que se percibe. Estas pueden dar a conocer los estados de ánimo, las fortalezas y las debilidades de la persona.
- Conductuales, son el cambio de ánimo y la conducta que se pueden apreciar por otros. El resultado visible de esa emoción.
Tipos de emociones
Las emociones pueden ser de distintos tipos:
- Básicas o primarias. Aparecen como respuesta innata a un estímulo.
Son la alegría, tristeza, ira, miedo, aversión, sorpresa.
- Secundarias. Se generan a partir de las básicas.
Vergüenza, culpa, orgullo, esperanza, ansiedad, celos
- Positivas o negativas. Según si la respuesta que provocan en la persona es beneficiosa o perjudicial para ella. Te recomiendo visitar este artículo en el que se presenta una excelente relación de las emociones positivas y negativas https://www.psicologia-online.com/emociones-positivas-y-negativas-definicion-y-lista-4532.html
Cual es el papel de los pensamientos en el bienestar emocional
Una vez presentadas las emociones, toca hablar de los pensamientos. Estos se desarrollan más tarde y son más susceptibles de modificar.
Dentro de la Psicología hay autores que se han especializado en estudiar las emociones y la función que tienen en nuestro bienestar. Un psicólogo relevante del siglo XXI es Paul Ekman, que se ha dedicado en profundidad a las expresiones faciales y las emociones que subyacen a ellas.
Él cambió su forma inicial de estudiar las emociones y concluyó que son universales y que su origen es biológico y no cultural. Aunque por ello ha sido muy criticado, sobretodo por los antropólogos.
Lo que sí está comprobado, es que las emociones son adaptativas y evolutivas, y los pensamientos son los encargados de mantenerlas en esa condición. Ya que las emociones pueden ser desadaptativas, según el grado en el que se producen o la duración en el tiempo.
Por ejemplo, la tristeza que te produce la pérdida de alguien querido es adaptativa, y va evolucionando con el tiempo. Si esa tristeza se transforma en tristeza profunda o tiene una duración excesiva, es cuando se vuelve desadaptativa.
Así que para conseguir un cambio emocional, necesitamos modificar los pensamientos que subyacen a ellas, que están en nuestra mano controlar.
Por ello es fundamental conocer las emociones básicas y el papel del pensamiento en ellas. Como ya he comentado todas las emociones tienen su función. Es algo sobre lo que trabajó el psicólogo americano Robert Plutchik en sus investigaciones sobre la rueda de las emociones, de lo que hablaré en otra publicación, por la importancia que tuvo en la Psicología de las Emociones.
Según Plutchik hay 8 emociones básicas que, según su intensidad y su combinación entre ellas, dan lugar a emociones secundarias. En la siguiente infografía he recogido la función de las emociones básicas.
Pero vamos a ver algunas de las emociones negativas que más nos preocupan a todos cuando aparecen, por si te puede ayudar lo que te estoy contando.
El miedo
Es una respuesta automática y no influye el pensamiento en ella. Se produce en el presente y la reacción fisiológica prepara ante un peligro, por ejemplo suben las pulsaciones por si necesitas huir. Por lo que no es controlable por nosotros. En este artículo de hace unos meses te hablé sobre cómo aprovechar el miedo para avanzar.
Lo que muchas veces creemos que es miedo, “tengo un miedo horrible a hablar en público”, no es miedo en su sentido más estricto. Es una visión nuestra de él que se relaciona más con la ansiedad, que ya hemos visto que es una emoción secundaria.
La ansiedad
Esta, por otro lado, es una emoción ante un estímulo ambiguo que pudiera representar o no un peligro. Es la que anticipa algo peligroso que puede suceder en el futuro. Por lo que en sí misma no es negativa. En ella influyen los pensamientos que son los que la convierten en excesiva o inadaptada y provocan los conocidos “trastornos de ansiedad”. Así que podemos controlar los pensamientos que le influyen.
La ira
La ira es una reacción defensiva ante un ataque hacia nosotros o alguien de los nuestros, así que tampoco es negativa por sí misma. Nos provoca una activación cardíaca e hiperventilación para ello. Y es el pensamiento otra vez el que modula y retroalimenta esta reacción fisiológica.
Así que serán los pensamientos que hay detrás los que tendremos que modificar para evitar que la ira se sobrepase de intensidad y de duración. Por otro lado algunas emociones secundarias como la verguenza, la culpa y la lástima pueden influir disminuyendo también la ira.
El bienestar emocional
Una vez que ya sabemos qué es una emoción y los tipos de emociones, el bienestar emocional es la capacidad de manejarlas y dominarlas sin reprimirlas.
el bienestar emocional es la capacidad de manejar y dominar las emociones sin reprimirlas
Siendo consciente de ellas, sin negarlas, y siendo capaz de mantener en el tiempo las positivas y de minimizar los estímulos que te provocan las negativas.
El bienestar emocional es el estado de ánimo que te hace sentir bien, en armonía con nosotros y con todo los que nos rodea. Conociendo nuestras fortalezas y nuestras debilidades podemos afrontar de forma equilibrada las tensiones y situaciones que nos esperan cada día.
Para tener bienestar emocional hay una serie de recomendaciones de vida sana que son generales para el bienestar integral, como alimentarte bien, hacer ejercicio, dormir lo suficiente. En este artículo puedes leer más sobre el estado emocional y su relación con el sistema inmune.
Y otras psicológicas, como por ejemplo, identificar y conocer tus emociones, tener un tiempo para ti y tus reflexiones, tomar cada día acción en busca de la felicidad que quieres para ti y los tuyos, aumentar las relaciones que te provocan esa felicidad y mantener controladas las situaciones que te provocan emociones negativas.
Conclusión
Definidas las emociones, ya has visto que todas son adaptativas y cumplen una función.
Algunas son básicas y no están supeditadas a nuestro pensamiento, pero hay otras muchas que sí las podemos controlar a través de lo que pensamos antes de que se produzcan.
Durante este mes de junio vamos a ir viendo pautas para conseguirlo. Con pequeños cambios puedes mejorar aquello que más te preocupa en tu día a día. Como la temida por todos ansiedad.
Cuéntanos como te influyen las emociones en tu vida, ¿tienes alguna pauta que te ayude cuando aparece alguna de ellas?
Déjanoslo en comentarios, ¡nos encanta leerte!